La manifestación de la ausencia

Por Valeria Guzmán. Video por Andrea Burgos

Artistas se reunieron el pasado martes 20 de mayo frente a La Asamblea Legislativa para exigir la aprobación de una Ley de Cultura. Se convocó a todo el gremio: teatro, danza, música, literatura, pintura, artesanos e incluso fotógrafos. Al final, el número de personas reunidas no sobrepasaba las 30.


René Lovo es un actor y director con amplia trayectoria en las tablas salvadoreñas. Él, desde su cuenta personal de Facebook, inició una cruzada por la unificación del gremio por un día: La segunda vez que sesionaba la Comisión de Educación y Cultura de la Asamblea Legislativa.

En las redes sociales, otros personajes del ámbito artístico se le unieron a la causa. Se hicieron tres invitaciones haciendo un símil con los tres llamados que se le hace al público en el teatro. Ahora no se llamaba al público, se llamaba a los protagonistas a acercarse a la política y hacerse presentes para exigir la deuda del Estado Salvadoreño en legislación cultural.

Sin embargo, el llamado causó muy poco eco. Las ocho de la mañana fue la hora acordada para empezar la reunión. Sucedió que a las nueve se habían hecho presentes al rededor de 20 personas. Tocaba el músico de un bar canciones de revolución y compañerismo. Dos chicas de la asociación de arte ESCÉNICA estaban disfrazadas de clown y ya se veían desanimadas.

Miembros del grupo de teatro Escénica hacen acrobacias mientras esperan frente a la Asamblea Legislativa. / Foto: Carla Ascencio

Artistas del grupo Escénica hacen acrobacias mientras esperan frente a la Asamblea Legislativa. / Foto: Carla Ascencio

Frente a la entrada peatonal de La Asamblea, dos jóvenes practicaban acrobacias. El resto de los manifestantes se sentaban. El ambiente desesperanzador era inevitable. Muy poca gente se reunió y los ánimos no subían. “Yo pensé que iba a venir más gente. Cada quien debería venir con su grupo artístico completo”, comentó Roberto Kofman, cineasta argentino que reside en El Salvador.

La música cesó y a eso de las 9:30 de la mañana y al aceptar que ya no llegaría más gente, el organizador, René Lovo, tomó la palabra. “Compañeros, estamos aquí para exigir la aprobación de la Ley de Cultura” alcanzó a decir el director. El discurso duró muy poco.

A los minutos, una delegación de 11 trabajadores del arte entraron al edificio de la Asamblea Legislativa. “Estamos acá porque ya viene un relevo y Lorena Peña es la principal promotora y gestora de la ley junto con los artistas que siempre hemos estado del lado de la crítica y conciencia social” expresó Nora Méndez, escritora.

La manifestación de los artistas se vio opacada por la presencia de otro grupo de alrededor de 100 hombres y mujeres campesinas que entraron al lugar al ritmo de una batucada. Por un momento, algunos artistas esperaron que se tratase de compañeros de gremio que se les unían, pero al comprobar que la otra concentración trataba un tema de agricultura, el desanimo era evidente. “Esto desmotiva un poco, como que el artista no cree o no tiene esa esperanza. Pero la idea es reactivarla en la juventud” comentó César Pineda, director artístico de la Asociación Escénica.

A las 11 de la mañana todos los que se hicieron presentes ya se habían dispersado y el tema de la cultura, según la comisión que ingresó a la Asamblea quedó en discusión. La concentración se volvió un espacio de charla y encuentro. No se cantaron consignas. No hubo fuerza. Lo único evidente fue una atmósfera desesperanzadora justificada por César Pineda: “Por años el sector artístico de El Salvador ha estado olvidado, fragmentado y marginado por todas las políticas de gobierno.”

 

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